El Concepto de libre albedrío, o libre elección, es una de las cuestiones más complejas y fascinantes de la espiritualidad. ¿Tenemos realmente la capacidad de elegir nuestras acciones, o estamos simplemente atrapados en un ciclo de causa y efecto? Es que la mayoría de las veces nos movemos en un mundo formado en la creencia de un destino inexorable previamente escrito e irrenunciable. Un mundo en el que, hagamos lo que hagamos, siempre obtendremos el mismo resultado diseñado por entes súperpoderosos y sabios. En este mundo de reglas y guiones pre-escritos, en el que solo somos marionetas representando nuestras vidas, el libre albedrio no tendría sentido ya que este se fundamenta en decisiones que deberían producir resultados diferentes. En un guion invariable, sin importar la decisión que tomemos, el resultado será el mismo… El Destino, en todos los casos, es inexorable e invariable. Personalmente creo que el plan divino para nuestras vidas si existe realmente. Solo que este plan es si
La ley de atracción es un principio espiritual que afirma que nuestros pensamientos y sentimientos atraen experiencias similares a nuestras vidas. La metáfora del auto en la oscuridad es una forma de explicar cómo funciona esta ley fundamental. Imagina que estás conduciendo un auto por la oscuridad. La luces del vehículo solo te permiten observar algunos metros de lo que hay delante de ti pero la mayor parte del camino permanece oculto en la oscuridad. La cuestión es que en realidad no necesitas ver la totalidad del camino porque sabes que está allí y conduces tu vehículo con la seguridad de que se irá revelando a medida que avances llevándote con seguridad a tu destino. De esta manera funciona la ley de atracción. Bueno, en realidad no necesitas "ver" cómo funciona. Basta que creas en ella y que te lances por su camino en la seguridad de que te llevará al destino que has creado para ti. ¿Cuál es ese destino?... depende de ti y tu capacidad creadora. Si mantienes tus pensami